Del 16 al 22 de agosto
20:00 horas en la Basílica de Santa María: Solemne Octava de Nuestra Sra. de la Asunción, Santa Misa y al finalizar, canto de las tradicionales SALVES.
Sábado 31 de agosto
23:00 horas en la Basílica de Santa María: SALVES en honor a la Virgen de la Asunción por la Agrupación Coral Dama de Elche.
Al finalizar, desde la torre del campanario, lanzamiento de la Palmera fin de mes (de San Ramón).
Salves a la Virgen de la Asunción
Del 16 al 22 de agosto a las 20:00 horas, tiene lugar en la Basílica de Santa María el canto de las tradicionales Salves a la Virgen de la Asunción. Previamente se celebra la Solemne Octava de Ntra. Sra. de la Asunción. Cada día, después de la Santa Misa se canta la Salve y a continuación los miembros de la Capella y de la Escolanía del Misteri d’Elx cantan los gozos. El texto de estos, con nueve estrofas y sesenta y ocho versos, son un tipo de resumen argumental de la Festa, la música de los cuales ya era interpretada en el siglo XVIII.
Tras finalizar las fiestas y las representaciones del Misteri d’Elx, se instala la cama de la Patrona, donde está hasta el día 22 para las tradicionales Salves. Una tradición que nació hace 3 siglos en la que se cantan los gozos a la Mare de Déu y se venera la imagen de la misma en su lecho de muerte haciendo eco de lo representado en el Misteri. Para ello se instala en el altar mayor de la basílica una cama portuguesa de ébano y adornos de bronce y plata (donada en 1747 por Gabriel Ponce de León -duque de Aveyro y marqués de Elche-) en la que se recuesta una imagen yacente de la Virgen ya coronada.
El presbiterio se viste con un cortinaje de terciopelo carmesí. Algunas piezas de esta cama como la cabecera, se encuentran expuestas el resto del año en el Museo de la Virgen de la Asunción Patrona de Elche, situado en la parte posterior de la Basílica de Santa María, frente a la Calahorra.
La primera referencia documental del Archivo de la Basílica de Santa María de Elche data del año 1596, pues en un inventario se nombran elementos destinados a la construcción del lecho mortuorio de la Patrona de Elche, aunque ignoramos como sería su configuración. Cabe señalar que en esa época, la cama se ubicaría en la Ermita de San Sebastián, lugar que albergó a la imagen de la Virgen de la Asunción hasta 1648.
Esta representación de la dormición se enmarca dentro de una costumbre muy extendida a la Corona de Aragón desde el siglo XVI para solemnizar la festividad de la Asunción.