La arquitectura celestial del Misteri d’Elx
8th, Ago
Más allá del cielo del Misteri d’Elx, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, hay un complejo sistema de poleas, maromas y esfuerzo humano cuyo trabajo no percibe el espectador de La Festa.
Es la arquitectura celestial que hace posible que los tres aparatos aéreos (Granada, Araceli y Coronación) desciendan desde la cúpula de la Basílica de Santa María para completar los alrededor de 23 metros de distancia que existen entre el mundo divino y el terrenal.
Ésta es una de las singularidades del Misteri: que la escena de este drama cantado de origen medieval que relata la dormición, asunción a los cielos y coronación de la Virgen María se desarrolla en dos planos distintos: el horizontal y el vertical.
El terrenal está compuesto por un escenario cuadrado, llamado cadafal, al que se accede a través del andador y es el lugar por el que van apareciendo todos los personajes de la obra a excepción de los que lo hacen por el cielo.
El escenario aéreo está instalado en la cúpula de la Basílica que se cubre con una gran lona pintada con nubes y ángeles que simboliza el cielo. Esa gran lona cubre la estructura de madera sobre la que se instala la tramoya alta para que los operarios puedan manipular los tres aparatos aéreos en un trabajo que pasa de generación a generación.
Estos tres aparatos suben y bajan desde la cúpula de la basílica atados con unas gruesas maromas que son accionadas mediante dos tornos movidos a mano situados en las terrazas del presbiterio de la iglesia.
Granada, Araceli y Coronación
El primero que aparece por el cielo es la Granada, sale totalmente cerrado y cuando desciende unos metros, se abren las ocho alas o gajos y en su interior hay un niño que representa el papel de ángel que anuncia a María su muerte.
El Araceli es el segundo aparato y, al igual que la Granada, es de origen medieval. Aquí descienden cinco personas: el Ángel Mayor, de pie, y a su alrededor cuatro ángeles (dos adultos y dos niños) ubicados en dos repisas diferentes.
El último en aparecer es la Coronación, un artefacto en forma de retablo donde un cantor representa al Padre Eterno y dos niños a las otras dos personas de la Santísima Trinidad.
Es el más esperado de los tres porque llevan la corona que se posará sobre la Virgen de la Asunción mientras cae una lluvia de oropel que acompañan los aplausos y vítores de los espectadores antes de que suene el último cántico ‘Gloria Patri’.
Concluye así el Misteri d’Elx, la expresión de un pueblo que ha sabido conservar durante más de 500 años estas representaciones convirtiéndose en la única obra de teatro medieval que sigue representándose ininterrumpidamente desde su origen, mediados del siglo XV, en el interior de un templo y la primera fiesta española en obtener la declaración de Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad.
El Misteri d’Elx se representa en dos partes: una el 14 de agosto (La Vespra) y el día grande 15 de agosto (La Festa) ambas representaciones con entrada libre. En los días previos, del 11 al 13 de agosto, se llevan a cabo los ensayos generales que concentran en un solo día la trama y se puede disfrutar de la misma con la adquisición de una entrada.
Las fiestas de Elche, un espectáculo único
El Misteri d’Elx centra los actos de las Fiestas de Elche que se celebran del 7 al 15 de agosto. Intensos días con cerca de un centenar de actividades que configuran un espectáculo único donde la historia, tradición e identidad de una ciudad se combinan con música, desfiles, pólvora y mucha diversión.
Al margen del Misteri d’Elx, otro de los grandes atractivos de las fiestas de Elche es la Nit de l’Albà que tiene lugar el 13 de agosto. Esta fiesta tiene su origen en la Edad Media cuando las familias ofrendaban a la Virgen con un cohete por cada uno de sus hijos.
Esta tradición ha evolucionado hacia un gran espectáculo pirotécnico que ilumina la noche ilicitana con la luz, el color y sonido de las más de 200 palmeras que se disparan desde los barrios de la ciudad. Tras estos cohetes, minutos antes de la medianoche se apagan las luces, suena el Gloria Patri del Misteri y se lanza la palmera de la Virgen, una gran palmera de luz blanca que sale desde la Basílica de Santa María y que ilumina por completo, durante unos segundos, todo el cielo de la ciudad.
Otro de los momentos más esperados de las fiestas es la Nit de la Roà (en la medianoche del 14 de agosto). Los ilicitanos alumbran con velas el recorrido que realizará al día siguiente la imagen de la Virgen de la Asunción, la patrona de Elche, durante la procesión del entierro. Al mismo tiempo decenas de miles de personas se divierten en las barracas municipales, barras y discotecas que se instalan por las calles de la ciudad hasta el amanecer.
Pero las Fiestas de Elche son mucho más, es el esplendor de las comparsas moras y cristianas que con sus desfiles y embajadas rememoran la conquista de la ciudad por las tropas del rey Jaime I en 1265, son las representaciones teatrales de la Asociación Histórico-Artística de Pobladores que difunden las culturas clásicas que pasaron por el levante español; la alegría y derroche de creatividad que lucen las comisiones de fiestas de los barrios de Elche en su charanga o las mascletás diurnas y nocturnas.
impresionante. es que es verdad La ...